VIAJE A BELALCÁZAR

          El miércoles día 18 de mayo de 2017, los cursos 6º, 1º y 2º de la ESO fuimos a visitar a Belalcázar. En este lugar nos adentramos en el convento, pero solo una zona, ya que la otra área se encontraban las monjas de clausura, donde no se podía entrar, su iglesia y el castillo, el cual no se puede entrar, pero nos informaron de que próximamente lo restaurarían y se podría estar en su interior, pero primero hablaré del convento, que fue lo primero que visitamos.
          Como ya dije antes solo teníamos disponible una zona, pero para ser solo la parte donde se puede estar, era bastante grande, pero en el patio, donde se encontraba el huerto de las monjas pero años atrás, no estaba, ya que se había sustituido por un suelo constituido por piedras formando figuras. En él, se hacía una representación de una obra, en la cual explica la historia de Belalcázar; en esa obra, me llamó la atención el hecho de que utilizasen arcones, pero no realmente lo eran, sino que era una especie de ave muy parecida; el guía nos explicó que las hembras tenían un mayor tamaño que los machos, además de tener plumas blancas en el pecho, cosa que los machos lo tenían todo marrón oscuro. Además el patio contaba con una imitación una cruz, ya que la verdadera no saben donde se encuentra, pero hay rumores de donde se encuentra esta.
          Las zonas donde estaban destrozadas, o que necesitaban arreglos, se las dieron al ayuntamiento, ya que las monjas no podían pagar las obras, pero como en Mérida, se destacaba lo que había sido reconstruido de lo que era original. Las monjas de clausura, dormían todas juntas, pero separadas por una cortina, y anteriormente no podían salir para nada, pero cuando llegó la guerra civil estas se marcharon del convento hasta que terminó la guerra, pero ni siquiera para ir al médico, en estos casos o bien venía el médico o si había alguien que supiera sobre este concepto, es decir, un médico que viviera allí. Habían 2 tipos de monjas, las del velo negro, que podían salir del convento, y las del velo blanco, las monjas de clausura. Algunos os preguntareis ¿y cómo consiguen dinero las monjas? pues muy sencillo, los dulces que venden, de hay sacan el dinero, además no les hace falta comprar comida, porque ya disponen de un huerto, pero como mencioné que antes se había sustituido, tenían otro, el cual era mucho mayor al que se había sustituido.
          Las monjas habían modificado el convento años atrás, pero se deshizo estas modificaciones para tener el convento como era anteriormente, o como ellas lo recordaban, ya que había barrotes de hierro, como si fuera una cárcel, pero claro, como eran de clausura, ya sabréis el porque de estos barrotes. Ahora las monjas pueden ir a otros lugares, pero si es necesario, y por su puesto me refiero a las de clausura. En el convento tenían dos enfermerías, la inferior era para el verano, ya que era más fresca y la superior para invierno, pero este convento, tenía la cualidad de tener techos de madera, que la mayoría eran de pino, y en la enfermería superior, tenía unos de los pocos techos que se encuentran en la península, este tenía forma de barco.
          Ya, agotados por el cansancio, nos dirigimos a las habitaciones de los frailes, estos contaban con una bodega, ya que tenían viñas y hacían vino, pero las monjas no podían acceder a él, pero tenían almacenes, etc. Ellos también estudiaban, pero constantemente, pero tenían unas habitaciones muy pequeñas, teníamos que pasar unos pocos, pero normal, en aquella época eran más pequeños, y bajos, de hay las puertas bajas, por último visitamos el comedero, donde comían las monjas, bueno, lo dice la palabra, en el que encontramos unos bancos, y como estábamos agotados, rápidamente nos sentamos, el guía nos dijo que solo serían unos minutos, pero no nos movimos de los asientos. Nos enseñaron los objetos que traían las monjas cuando estas se quedarían en ese convento, hay solo había unas cruces, pero habían muchas más, pero con la guerra ya sabréis lo que sucedió, además las vestimentas de un fraile muy importante. El guía nos llevó a dónde habían algunas monjas que hacían dulces, pero los daban en una bandeja giratoria, la cual no deja mostrar a la persona que se encuentra detrás de ella; en ella se deja el dinero, y dan lo que han pedido y la vuelta.
          Al salir empezamos a comer, y algunos compraron dulces, aun que algunos nos movíamos porque se estaban presentando avispas, pero la mayoría no le parecía importarle que vinieran una avispa o dos. Cuando terminamos fuimos a la iglesia, esta tenía bancos, como una iglesia común y corriente, pero los primeros estaban divididos con los de atrás por unas verjas de hierro que tenían una puerta del mismo material, que era donde se sentaban las monjas cuando iban a misa, y arriba había asientos, que era donde se encontraba el coro, pero por donde se podía ver la parte de abajo, anteriormente estaba con barrotes, pero ahora está en vez de los barrotes, por una verja de madera.
          Por último nos dirigimos hacia el castillo, en el cual Napoleón Bonaparte se encontró en él años atrás; cuando le lanzaron bolas de cañón, apenas se dañó, por el grosor de los muros, pero los sacaron porque se quedaron sin recursos para sobrevivir allí, cuando salieron había un ejercito que los apresaron, pero el castillo lo destruyeron más sus habitantes para hacer casas que los enemigos, la pena es que no se podía entrar, pero como os expliqué anteriormente, lo restaurarán para que podamos pasar a su interior. Este castillo, en la torre del homenaje, sus paredes tenían un grosor de ¡4'40 metros! y el resto ¡2'20 metros!, normal que los cañones no resultaran eficaces. En la torre que he mencionado, los que vivían en ella, pusieron tantos escudos como hijos tuvieran, y tiene esta torre 8 escudos, 4 se encontraban en las mitades de los lados de la torre, y el resto en las esquinas, pero este castillo es muy importante, ya que ¡es el castillo con la torre del homenaje más alta, con 47 metros de altura!
          Y finalmente nos dirigimos hacia el autobús, pero hicimos una parada antes de subir a él, ya que los maestros se estarían tomando algo o eso me habían contado mis compañeros. Esto es todo lo que hicimos en Belalcázar, no tengo ninguna foto, porque me dejé la cámara de fotos en casa, pero pondré algunas fotos, espero que os guste esta entrada y sigáis visitando mi blog, adiós.